Bajo tierra

Bajo tierra

Bajo tierra esperando

a la nodriza madura

que traiga a la cerradura

la necesaria llave,

aquella en forma de clave

que nos abrirá el futuro

librando a aquel ser oscuro

de maléfica obsesión

y estratégica posición

que el futuro está tramando.

Enclaustrado en esa tumba

esperando los sucesos

que estando en proceso

aún no son absolutos

pues nada es irresoluto

en la guerra del bien y el mal

que se lucha de forma tal

que no hay rehenes ni heridos,

ni neutrales ni rendidos

sólo guerreros en batalla

que pelean con metralla

enterrada en sus cuerpos

que podrán yacer yermos

al final de la contienda

pero mientras ella tienda

a su eternización

los guerreros con pasión

seguirán batallando.

Bajo tierra liberado

por la nodriza añosa

que pese a todo, ganosa,

cumple con su misión

de la liberación

del mesiánico general

que guía las huestes del mal

al triunfo sempiterno;

en este tiempo moderno

que derrote el mal al bien

no habrá de extrañar a quien

conozca la realidad,

esta loca brutalidad

que vivimos día tras día

y que sin miedo nos guía

a entender que dicha victoria

sólo haciendo algo de memoria

nos deja donde mismo.