No malinterpretar

Para aquellos que caéis en esta red de confusión, no malinterpretéis el sentido de este pseudopoema: si bien el desarrollo puede aplicarse en cierto sentido a mi presente, el final da a entender algo que no es así (recordad que son escritos con más de una década). Por lo tanto, no creais que os libraréis tan fácilmente de mi. . . . .

Aquellos años

Como en aquellos años en que escribía,
tardes enteras absorto en un papel
gastando mis palabras sutilmente,
aquellas que nadie quería escuchar,
ni aún saber de su existencia...
Aquel pasado, de ayer, de hace siglos
cuando un tapiz de tristeza y soledad
encerrados a presión y luego liberados,
me ahogaban;
pues aunque ya no latían en mi dentro,
las tenía encarceladas en cualquier burdo papel,
conservando aún la llave...
Y hoy, que vivo en compañía recuerdo mi soledad,
hoy, que vivo plenamente recuerdo mi esencia vacía;
hoy, que al fin vivo, recuerdo cuando estuvo muerto .
Por un instante reviví mi pesadilla,
con todos los monstruos que una vez me acosaron,
buscando un resplandor que me guiara
hacia alguna salida algo más humana;
aquel tiempo en que sólo me hundía,
y cuando luchaba por hundirme más y más;
aquél pasado tan cercano, tan lejano,
y que hoy, por un instante, revivió.
Pero vuelvo a ser el de hoy, felizmente,
ya no podía continuar con tal tortura,
pues tu presencia, o más bien, tu existencia,
cambian muy rápido mi ánimo y mi vida
y ahora, que tu recuerdo ha aparecido,
y me ha devuelto aquello que nunca perdí,
no tengo para qué más escribir.
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